ISSN 1973-9702

cop 2

El arte musivario como  un elemento decorativo transmisor de ideologias y coadyuvante a la mezcla de culturas  diversas

di José Antonio Torres de la Fuente 

Dottorando in cotutela tra l’Università Roma Tre (Dipartimento di architettura) e l’Università di Malaga (Facoltà di Turismo)

 

INTRODUCCION

El origen del arte musivario se remonta  hace miles de años,  utilizado durante algunos periodos históricos con mucha fuerza y en otros prácticamente apenas aflorado, pero manteniendo su carácter cíclico de volver a reaparecer en otras épocas con más fuerza, constituyendo una de las más grandes y antiguas manifestaciones ornamentales del arte.

La palabra mosaico proviene etimológicamente de la griega mousai, obra paciente, que según el historiador griego Pausanias, autor de la obra Descripción de Grecia,  las musas eran tres hermanas, representando cada una de ellas una manifestación: Aedea (el canto), Meletea (la meditación) y Mnemea (la memoria).

DESARROLLO HISTORICO Y ELEMENTO TRASLATIVO DE CULTURAS

En Mesopotamia, posiblemente, encontramos el primer mosaico realizado con cilindros pequeños y conos,encastrados en la gruesa capa de mortero de barro y en la capa superficial de yeso con su base cuadrada, antecedentedel opus reticulatum y opus misivum. 

Roma no olvido que el reino de Macedonia, ayudo a Cartago, en la segunda guerra púnica y antes de iniciar la tercera guerra púnica, la sitio e incorporo el reino macedonio, siendo notoria desde ese momento la relación entre Roma y la Hélade. En la Grecia Clásica, los mosaicos con motivos geométricos se emplearon desde muy temprano en pavimentos compuestos por guijas de río de distintos tamaños y colores.

En el siglo II en Grecia, los mosaicos eran un género arquitectónico común, al que los romanos dieron un gran impulso, absolviéndolo y transformándolo en una especialidad artística propia, mediante el empleo de la técnica conocida como opus tessellatum, utilizando piedra, vidrio o cerámica.

Enel periodo Helenístico el mosaico alcanza un gran desarrollo, difundiéndose y empleándolo para todo tipo de formatos Plinio el Viejo en su obra Naturalis historianos narra cómo era preparado el sitio donde finalmente sería colocado el mosaico. El suelo de los edificios podía soportar de dos a tres capas de mortero cuya composición era cal, arena y grava. El proceso para la construcción de un mosaico se iniciaba mediante la apertura de una  zanja en el pavimento, alisándose a continuación para colocar una primera capa llamada statumen, piedras grandes para cimentar.

Posteriormente, se colocaba una segunda capa llamada rudus,grava con cal y finalmente se colocaba una última capa llamada nucleusque era la parte sobre la que el mosaico sería adherido.

Fundamentalmente los mosaicos se realizaban mediante la aplicación de cuatro técnicas:

 –La primera es el denominado opus tessellatum, con pequeñas piezas cúbicas llamadas teselas, palabra de origen latino tessellae, que podían ser de diferentes materias.

Las teselas de mármol o de piedra de color, se cortaban en finas láminas, luego en tiras y después en cubos. Las teselas de oro y plata se conseguían colocando pan de oro o plata encima de una lámina de vidrio de tono claro. Las teselas de vidrio fundido se vertían encima de una superficie lisa para que se enfriara y se endureciera, esta lámina de vidrio coloreado era cortada en tiras y luego en cubos. La segunda técnica es el llamado opus vermiculatumlos mosaicos hechos bajo esta utilizan teselas muy pequeñas para lograr darle a los mosaicos la apariencia de una pintura.

La tercera técnica es el opus sectile, era la más usada para cubrir el pavimento mediante el empleo  de grandes trozos de piedra o de mármol que van encajándose unos con otros. La cuarta técnica es el opus signinumque se hizo muy popular por su coste económico bajo, era un mosaico fraguado con arena de ladrillo. Los mosaicos de más alta calidad eran los conocidos como emblemata elaborados en talleres donde los mosaístas los elaboraban  con una imagen perfilada  transportándolos finalizados de para su colocación. Alrededor de la emblemata, la imagen central, se instalaban otros mosaicos con la finalidad de resaltar la imagen principal y en forma de marco. Los mosaicos eran para los romanos un elemento decorativo para los espacios arquitectónicos de tal manera que no había palazzo o  villae romana que no tuviera mosaicos en techos y paredes, representando temas de caza y de la vida cotidiana, sin olvidar los más característicos sobre mitología.

Los balneum, baños privados, y en las termae, baños públicos, también fueron lugares donde se colocaron mosaicos con escenas de monstruos marinos, ampliando su colocación en pavimentos cuando descubrieron que los mosaicos podían resistir las pisadas. Los motivos más frecuentes sobre los que versaban eran relacionados con temas mitológicos, aunque fueron muy solicitados los que representaban escenas de caza y de la vida cotidiana. Cuando Roma es conquistada por los  bárbaros, el arte musivario se refugió en Oriente, creándose en Bizancio y en el resto del Imperio de Oriente escuelas de mosaicistas que llenaron los muros de las Basílicas de pequeñas piezas de colores con el deslumbrante brillo de sus imágenes sagradas.

En el Renacimiento europeo recupera el mosaico,  época conocida como la Roma de los Papas, se construyeron las Basílicas romanas, resurgiendo la Escuela Vaticana del Mosaico, comenzándose la sustitución de las pinturas por mosaicos, al tener mayor duración por la incidencia del humo de los cirios y las variaciones climáticas. A principios del siglo XX los mosaicos recuperaron su popularidad, fruto de un creciente interés por las artes decorativas. El Modernismo Art Nouveau   utilizó los mosaicos como forma elevada de decoración, integrándolo en sus obras los arquitectos y artistas. La técnica favorita en esta época de la historia es el trencadís, troceado, una aplicación ornamental del mosaico a partir de fragmentos cerámicos y vidrio unidos con argamasa.

 

CONCLUSIONES

Estos son una conjunción de pensamientos, no solo técnicos sino también sociales, dando como resultado que una cultura puede enriquecer a otra y la otra retroalimentarse de lo que le brinda la sociedad. Son un elemento decorativo para espacios arquitectónicos, mostrándonos la vida social, política y cultural  no solo de los romanos sino también de todos aquellos pueblos que tuvieron contacto con ellos, transfigurándose e impregnándose de cada cultura.

Los mosaicos no fueron estáticos, sino que han evolucionado con el tiempo, puesto que la técnica y la ideología plasmada cada vez fueron más complejas. Cuando hablamos del arte musivario en Roma, debemos de entender que este no solo hace referencia al desarrollado en la Península Itálica, ya que los romanos se expandieron de manera tanto diplomática como militar por todos los alrededores de la península, conquistando, entre otros, a pueblos galos, cartagineses y griegos.

Su valor fundamental está en su uso multifuncional, no solo práctico sino también hermoso transmitido en las ideologías y pensamientos de cada época.  No existe ninguna contradicción entre las responsabilidades nacionales y las acciones de los órganos comunitarios, pues debe entenderse que el patrimonio cultural no es solo nacional sino también europeo.

Esta cultura ha dado lugar a la acuñación de expresiones como “mosaico cultural” para describir la mezcla de grupos, idiomas que coexisten en una misma sociedad. Las disposiciones de los órganos de la Unión Europea en materia de colaboración de los estados miembros están coadyuvando a la protección de este patrimonio cultural, que se inició con la directiva 93/07/CEE del Consejo de 15 de marzo, que abrió lla colaboración efectiva y desarrollada por la Directiva 2014/60/UE, del Parlamento Europeo y del Consejo de 15 de mayo de 2014, sobre restitución de bienes culturales que hayan salido de forma ilegal de un estado a otro miembro de la Unión Europea.

Así pues la incorporación de este patrimonio cultural será un factor importante para  el bienestar económico, generador empleo y de cohesión social, haciendo del territorio europeo un lugar deseado no solo para establecerse sino también para visitarlo.

 

Bibliografia

Becatti, G.1987,“Studi sul mondo classico”, Roma.

Beckwith, J.1997,”Arte Paleocristiano y Bizantino”, Madrid.

Bertacchi, L.1985, “I mosaici di Aquilea”, Mosaics nº 3, Conservation in situ, Aquilea.

Bianchi, R. 1971,”Roma el fin del arte antiguo”, Madrid.

Blanco, A. 1989,”Roma  Imperial”. Madrid.

Garcia Bellido, A.1990,”Arte romano”, Madrid.

Maioli, M.G. 1998, “Il restauro di mosaici su cemento: una tecnica sperimentale”. En Atti del V Colloquio dell’Associazione Italiana per lo Studio e la Conservazione del Mosaico, AISCOM, Roma.

Nardi, R. 1994, “Conservazione preventiva dei mosaici nei siti archeologici”. En Atti del I Colloquio dell’Associazione Italiana per lo Studio e la Conservazione del Mosaico, AISCOM, Ravenna .

Poggi, P.” Los mosaicos y los monumentos”. Guía histórico-artística de Rávena. Cartolibrería Salbaroli, Rávena.

 

Immagini

copertina: Gato atrapando a un pollo, La casa del Fauno, Pompeya. S. I a. C. Museo Arqueológico Nacional de Nápoles

fig.1: Mater-Ecclesiae, Mosaico-Vaticano, 1981

fig.2: Veniatio, Dehesa de las tiendas, Mérida. S. IV d. C.